Llegué rota, pero aquí aprendí que mis pedazos también tenían valor. Hoy soy una versión más fuerte de quien era. 

Anónima.
Paciente Recuperada
     

 No creía que pudiera volver a confiar en mí misma. Este lugar me devolvió no solo la esperanza, sino las herramientas para construir mi nueva realidad. 

Luisa R.
Paciente Agradecida
     

 Pensé que pedir ayuda era rendirme. Descubrí que era el acto más valiente que podía hacer por mí. 

Andres G.
Paciente Recuperado